Este estándar está basado en los principios del control de la calidad, que incluyen un fuerte foco en el consumidor, la motivación e involucramiento de la alta dirección, el enfoque en procesos y la mejora continua.
ISO 9001 puede ser aplicada en cualquier organización, grande o pequeña, sin importar el rubro o la actividad que realiza. De hecho, hay más de un millón de empresas en más de 170 países certificadas ISO 9001.
Incrementa la ventaja competitiva
Facilita el acceso a mercados globales
Satisface los requerimientos del comprador
Ayuda a reducir los costos operativos
Realza la imagen pública de la organización